La vida son 2 días … y 1 ya ha pasado, así que debemos aprovechar cada segundo y disfrutarlo al máximo y dejarnos de tonterías y de preocuparnos de cosas que no merecen la pena y sí de aquellas que realmente merecen toda nuestra atención.
Y porque digo esto, pues muy sencillo. El viernes leí en el Facebook a una madre diciendo que no estaba preparada para despedir a un hijo, y sin saber lo que luego descubriría, sólo fui capaz de mandarle un beso.
Como por el FcBk nunca sabes como ha llegado a ti la gente, me fijé que a su marido tambien lo tenía agregado y que a los 3 nos unía el blog de cocina de una bloguera.
No me lo podía creer y pensaba que no podía ser ella. Hasta que lo que no quería confirmar, su tía me lo confirmó y era que Mayte Hortelano del Blog El horno de María nos había dejado
Una de las cosas que su tía me dijo y que me quedó grabada es “cocina sus recetas y asi la recordarás”. Así que hoy mi receta es de ella y en su honor
Reconozco que he hecho un par de ellas, pero ahora os dejo con esta que ella nos puso Tarta de Queso Rápida, de la Abuela María
Mayte, desde aquí quiero rendirte este pequeño homenaje con esta receta de tu abuela María
TARTA DE QUESO RAPIDA
* 200 gr. de queso crema
* 1 yogur natural
* 70 gr. de azúcar
* 2 huevos
Ponemos en un recipiente el queso, los yogures y el azúcar y batimos bien, a velocidad alta, hasta que la mezcla quede bien homogénea. Bajamos la velocidad y vamos agregando los huevos poco a poco; continuamos batiendo hasta que se integren.
En el molde incorporamos caramelo líquido cubriendo bien el fondo (alrededor de 1 cm. más o menos). Con este caramelo, y mediante los giros apropiados, trataremos de impregnar las paredes del molde. Podemos ayudarnos de una brocha de silicona para insistir en algunas zonas donde no hayamos podido llegar, como las esquinas. El caramelo impedirá que la tarta se pegue al molde, por eso es importante que quede una ligera capita alrededor de las paredes. El sobrante escurrirá hacia el fondo, que siempre debe conservar alrededor de 1 cm. de caramelo.
Verter cuidadosamente la crema de queso sobre el molde impregnado de caramelo.
Para hornear la tarta al baño maría, busca un recipiente apto para horno, más grande que tu molde. Llénalo de agua, comprobando que llega, al menos, hasta 2/3 del nivel de la crema. Ten en cuenta también que el agua no debe entrar nunca dentro del molde, solamente estar en contacto con sus paredes.
Pon el recipiente con agua sobre una bandeja de horno, sitúala en la zona media del mismo y precalienta a 200º C. Cuando esté caliente, introduce el molde con la crema, déjala un par de minutos así, y después baja la temperatura a 180º C. Hornea aproximadamente 20/30 minutos, o bien hasta que pinches (sin llegar hasta el fondo) y el palillo o cuchillo salga seco.
Saca la tarta del horno y deja enfriar a temperatura ambiente durante unas horas. Cuando esté bien fría, para desmoldarla, sumergimos la base del molde en un recipiente con un poco de agua tibia, para que se caliente el caramelo y nos permita despegar la tarta. Con una espátula de silicona (mejor que con un cuchillo), separa la tarta de las paredes. Comprueba que está ya suelta del todo, moviendo el molde hacia los lados. Vuelca la tarta sobre el recipiente escogido.
NOTA: En vez de usar un molde de cake para que me quedase una tarta “ancha”, lo hice en un molde redondo, para que me quedara mas finita
Y como el caramelo siempre me ha dado la impresión de que se “come” el sabor de las cosas, pincelé el molde con Golden Syrup, que es un caramelo clarito y con un sabor mucho mas suave